miércoles, 13 de julio de 2011

20 pasos para ahorrar en las facturas energéticas

Hábitos sencillos de ahorro
A pesar de los datos del IPC, la situación económica hace que se imponga ahorrar. Si se siguen unas sencillas pautas, en solo 20 pasos, es posible reducir el monto de las facturas energéticas:

1. La iluminación de una casa representa entre la cuarta y la quinta parte del recibo de la luz. Pero si la vivienda tiene orientación interior o, pese a ser exterior, se encuentra en zona sombría, llenarla de luz puede suponer hasta la mitad de la factura de electricidad. Una buena forma de reducir ese gasto es recurrir a la iluminación natural: mantener abiertas persianas y cortinas mientras haya claridad en el exterior ayuda a aprovechar la luz solar.

2. Acostumbrarse a encender las luces solo cuando sean necesarias y apagarlas cuando no haya nadie en las habitaciones o zonas de la casa supone reducir la factura del mes siguiente.

3. Elegir colores claros para la pintura de techos y paredes. La sensación de luminosidad es mayor y permanece por más tiempo en fondos blancos, cremas o de tonos pastel.

4. Sustituir las bombillas tradicionales, incandescentes, por las eficientes, que proporcionan la misma luz, duran ocho veces más que las convencionales y ahorran hasta un 80% de energía. Basta con cambiar las tres bombillas de mayor consumo de toda la casa para que se reduzca a la mitad el gasto en iluminación.

5. Instalar tubos fluorescentes en los espacios donde se necesite mucha luz y donde esta permanezca encendida por mucho tiempo: baños, cocina, trastero. Hay que evitar encenderlas y apagarlas continuamente.

6. Cocinar con recipientes de fondo igual o mayor que las dimensiones del fogón.

7. Tapar las cacerolas y utilizar, siempre que la receta lo permita, la olla exprés.

8. Para terminar el cocinado, aprovechar el calor residual emitido por la placa, que queda al apagarla.

9. Abrir la puerta del horno solo cuando sea imprescindible.

10. Instalar el frigorífico en un lugar fresco, ventilado y lejos de los focos de calor.

11. Mantener la parte trasera de la nevera limpia y al menos a un par de centímetros de las paredes cercanas.

12. Descongelar y limpiar a menudo el frigorífico, antes de que la capa de hielo aumente. Instalado en malas condiciones puede consumir un 15% más de energía.

13. Mantener el congelador entre -18ºC y -15ºC; el frigorífico, entre 3ºC y 5ºC.

14. Abrir las puertas del frigorífico solo lo necesario y nunca dejarlas abiertas: unos pocos segundos son suficientes para que se pierda buena parte del frío acumulado. Para recuperarlo, gastará más energía.

15. Apagar la televisión si no se utiliza. No se debe hacer de cualquier manera: hay que desconectarla a través de los interruptores de los propios aparatos, porque cuando se apagan con el mando a distancia, algunos de sus componentes siguen activados y consumen energía.

16. Comprar lavadoras y lavavajillas con etiqueta energética de categoría A. Además, deben contar con ciclos económicos y cortos, y ofrecer la posibilidad de elegir entre distintas temperaturas de lavado. El mayor gasto de energía, tanto en la lavadora como en el lavavajillas, se registra al calentar el agua, por lo que seleccionar temperaturas bajas equivale a ahorrar electricidad: el ciclo de lavado a 60ºC consume el doble de electricidad que el de 40ºC.

17. Utilizar la lavadora y el lavavajillas al máximo de su capacidad, pero sin llenarlos en exceso.

18. Planchar la mayor cantidad posible de ropa en cada ocasión. Evitar repasar piezas sueltas a menudo, ya que supone multiplicar el consumo de electricidad.

19. Reducir las fugas de calor y aislar la casa con doble acristalamiento y burletes en puertas y ventanas. Con un buen aislamiento térmico se puede ahorrar entre un 20% y un 40% en calefacción.

20. Sustituir el baño por la ducha: se consume la cuarta parte de agua y energía. Regular el termostato del agua entre 50ºC y 60ºC. Por encima de esa temperatura, además de malgastar energía, se reduce la vida útil del termo por la acción corrosiva del agua muy caliente.

Fuente: CONSUMER.ES

No hay comentarios:

Publicar un comentario