Una especie viva de distribución restringida que no tiene parientes próximos más que en forma fósil. Esto es lo que se conoce como fósil viviente. Precisamente, lo que un equipo de investigadores encabezado por el científico del Real Jardín Botánico de Madrid, CSIC, Pablo Vargas, vendrá a buscar a Ponferrada. La Gyrocaryum es uno de los cinco géneros de plantas más antiguos de España que pretenden ser incluidos en este selecto grupo de seres vivos de máxima protección a través de los Proyectos Cero en Especies Amenazadas de la Fundación General CSIC. Para ello, habrá que localizarla y estudiarla. Será en primavera cuando el equipo de expertos viaje al Bierzo a fin de conocer más de cerca una planta sobre la que se tiene constancia de una sola población en el municipio de Ponferrada.
Es, tal y como lo definió la profesora Carmen Acedo, del Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambiental de la Universidad de León, «una planta muy rara de la que apenas se tienen datos». Se parece, aseguró Acedo, a las que comúnmente se denominan no me olvides , pero pertenece a otro género. De hecho, la Gyrocaryum constituye un género único, una única especie y es única en el mundo. De ahí, la necesidad de protegerla. «Estamos hablando de que podría desaparecer un género entero», recalcó Pablo Vargas. Aunque ahora será el CSIC quien financie la investigación, la Universidad de León lleva casi una década haciendo seguimientos de esta población para conocer su dinámica e identificar las amenazas que la afectan.
No es comestible, no se conocen usos concretos y se describió por primera vez en la década de los 80. El hecho de que esta planta sólo sobreviva en Ponferrada es un misterio, dado que también se tiene constancia de su existencia pasada en Sevilla y Madrid. No obstante, no es la única planta protegida que tiene el Bierzo. Hay unas doce, según informó la experta de la Universidad de León. Si bien es cierto que ninguna de las demás es de la rareza de la Gyrocaryum y tampoco están sometidas a la máxima protección. Este número de plantas protegidas corrobora la riqueza natural de la comarca. Una zona «rica en cuanto a plantas de interés», aseguró Acedo.
En su búsqueda de plantas muy amenazadas, consideradas joyas del patrimino natural con más de tres millones de años, el equipo de investigación encabezado por Pablo Vargas y formado por científicos de la Universidad de Granada, el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, la Universidad de Edimburgo y el Jardín Botánico de Valencia buscarán también la Avellara fistulosa , que sólo se encuentra en Doñana; y la Castrilanthemum , que sobrevive en las sierras andaluzas. Ambas de la familia de las margaritas. También investigaránla Naufraga , de la familia de las zanahorias y que se encuentra en el norte de Mallorca; y la Pseudomisopates , localizada en la zona del Mediterráneo.
Fuente e imagen: Diario de León
Es, tal y como lo definió la profesora Carmen Acedo, del Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambiental de la Universidad de León, «una planta muy rara de la que apenas se tienen datos». Se parece, aseguró Acedo, a las que comúnmente se denominan no me olvides , pero pertenece a otro género. De hecho, la Gyrocaryum constituye un género único, una única especie y es única en el mundo. De ahí, la necesidad de protegerla. «Estamos hablando de que podría desaparecer un género entero», recalcó Pablo Vargas. Aunque ahora será el CSIC quien financie la investigación, la Universidad de León lleva casi una década haciendo seguimientos de esta población para conocer su dinámica e identificar las amenazas que la afectan.
No es comestible, no se conocen usos concretos y se describió por primera vez en la década de los 80. El hecho de que esta planta sólo sobreviva en Ponferrada es un misterio, dado que también se tiene constancia de su existencia pasada en Sevilla y Madrid. No obstante, no es la única planta protegida que tiene el Bierzo. Hay unas doce, según informó la experta de la Universidad de León. Si bien es cierto que ninguna de las demás es de la rareza de la Gyrocaryum y tampoco están sometidas a la máxima protección. Este número de plantas protegidas corrobora la riqueza natural de la comarca. Una zona «rica en cuanto a plantas de interés», aseguró Acedo.
En su búsqueda de plantas muy amenazadas, consideradas joyas del patrimino natural con más de tres millones de años, el equipo de investigación encabezado por Pablo Vargas y formado por científicos de la Universidad de Granada, el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, la Universidad de Edimburgo y el Jardín Botánico de Valencia buscarán también la Avellara fistulosa , que sólo se encuentra en Doñana; y la Castrilanthemum , que sobrevive en las sierras andaluzas. Ambas de la familia de las margaritas. También investigaránla Naufraga , de la familia de las zanahorias y que se encuentra en el norte de Mallorca; y la Pseudomisopates , localizada en la zona del Mediterráneo.
Fuente e imagen: Diario de León
No hay comentarios:
Publicar un comentario